27 noviembre 2005

¿El tamaño importa?


Todo es cuestión de escala

A la hora de ponerme a hacer cosas, sea lo que sea, desde un pastel hasta un jersey, sieeeempre lo hago grande. No soy de las de cosas pequeñitas llenas de detalles y primores, no. Yo, caballo grande, descomunal. Así que después de hacer un par de bolsas afieltradas de un tamaño razonable, decidí lanzarme a hacer la megabolsa, esa bolsa con la que me imaginaba recorriendo las calles de la ciudad, la viva imagen de lo chic y fashionista y con espacio para guardar una agenda, un libro, un estuche, un proyecto de punto, unos pañales, un camión, un superhéroe... Vamos, todas esas cosas imprescindibles. Con esa idea en la cabeza cogí mis agujas y cuatro madejas de 100 gramos para hacer la madre de todas las bolsas y me senté a tejer en marzo. Y tejí... Y tejí... Y tejí...


¿Le queda alguna plaza de garaje libre ahí dentro?

Tejí pensando "encogerá en la lavadora, tengo que hacerlo grande". Con cada puntada repetía el mantra "encogerá, hazla grande, encogerá, hazla grande". Y, como no podía ser menos con mi historial, salió grande. Muy grande. Demasiado grande. Así que toca deshacerla y mandar la lana al exilio durante una temporada. Que nadie me hable de bolsas afieltradas...

3 comentarios:

betta dijo...

Pero la vas a deshacer antes de afieltrarla? Seguro? Qué moral!

H. dijo...

JO JO JO!!!!!!
Calla calla, que yo estoy igual con el Satchel de Knitty...
Yo pienso, encogerá, encogerá... pero lo cierto es que de momento es descomunal...

maga dijo...

Una pregunta de novata: ¿Se puede deshacer la labor despues de afieltrarla?

Es por la pregunta que hace Betty de si las vas a deshacer antes de afieltrarla.

Por cierto, la entrada es muy antigua, ¿que pasó al final con la bolsa?